miércoles, 11 de marzo de 2015

EL LLAVERO Mercedes





           Yo estuve mucho  tiempo expuesto en un escaparate, donde mucha gente se paraba para contemplarme y comentaban lo bonito que rea. Pero, nadie me compraba y a mí eso me dejaba mal, pues yo lo que quería era tener un dueño, ¡quería ser comprado! Y ese día llegó. Alguien que me vio me quiso comprar y por fin salí de aquel escaparate, sintiéndome muy contento y orgulloso;  ¡por fin soy el llavero de alguien!.
            Mi dueño enseguida me colgó de una mochila, la cual tenía que ser muy pesada, pues el dueño se quejaba y se quejaba. También me acompañaban dos llaves con las cuales enseguida hice amistad pues desde el principio nos caímos muy bien.
            Pasó el tiempo y me di cuenta de que nuestro dueño sólo usaba una de las dos llaves, con la cual abría y cerraba muchas puertas, sin más, y al preguntarles a mis amigas las llaves el porqué, la que no se usaba nunca me contestó, nosotras tampoco lo sabemos. Pero si es cierto que cuando me coge en sus manos, suele ponerse muy nervioso y me he dado cuenta de que hay una puerta que nunca abre. Y yo le pregunto a mi amiga la llave ¿y si probamos contigo? Se introdujo en la cerradura de la misteriosa puerta que jamás se abría y algo extraño se apoderó de mí al verla abierta. Lo primero, me desprendí de la mochila pesada, que ni su propio dueño soportaba… noté que me invadía un rayo nuevo de fuerza y voluntad y comprendí que en la vida por muchas montañas que te pongan delante, jamás debemos creer que no vamos a poder subirlas, escalarlas. Sí, hay que hacerlo.





3 comentarios:

  1. Celebramos tu regreso al Taller y a este blog, Mercedes. Llegas con fuerza pues nos traes un relato que encierra simbolismos; al menos yo veo que este llavero tuyo tiene llaves que abren mucho más que puertas. Muy bien.

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  2. Feliz regreso!! me alegra tenerte de vuelta ya se te echaba mucho de menos, bienvenida.

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  3. Me ha encantado tu relato, Posee sentimientos. Muy bonito. Mª Dolores de Flores del
    Teide.

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