miércoles, 4 de febrero de 2015

REENCUENTRO Carmen Garcés



            Abrió la última puerta y allí estaba lo que andaba buscando;  había recorrido toda la mansión, revisado las habitaciones una a una y, por fin, había llegado hasta ella.
            Entró en la estancia.  Se percibía un fuerte  aroma a jazmín.  Echó una ojeada a su alrededor.  La cama donde había dormido esos últimos años, el sillón al lado del gran ventanal, donde acostumbraba sentarse a leer cada tarde; sus libros…su historia, allí estaban todos rodeándola.
            Cerró los ojos y, por un instante, sintió su presencia. Esto le produjo un intenso escalofrío, sin embargo no sintió temor. 
Con cada objeto que tomaba entre sus manos, el rostro se le iluminaba; aun así, sentía la garganta anudada:
-         Si no hubiera sido tan orgullosa,  habría podido despedirme…

            Permaneció en aquella habitación durante horas.

            Al salir, dejó en aquella estancia todo lo que durante años la había afligido; se había reencontrado con el amor infinito que su abuela le profesó, y ahora, se marchaba reconfortada.  Cantando la canción preferida de ambas, se fue; nunca más volvería, pero eso ya no importaba.




1 comentario:

  1. Microrrelato que nos habla de los efectos sanadores que trae consigo reconciliarse con el pasado. Me gusta la atmósfera que has logrado crear a partir de la frase inicial impuesta. Buen trabajo

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