jueves, 14 de marzo de 2013

¡NO HAY QUE TOMARSE LA VIDA TAN EN SERIO! de Mercedes Álvarez




Tienes un grupo de amigos de muchos años con los cuales compartes muchas cosas de tu vida, incluso llegas a creerte que sin ellos no eres nadie.  Son como un pilar para poder seguir adelante. 
Yo siempre estaba de acuerdo con todo lo que se decidía en conjunto en nuestra relación de amistad y creía que ésta marchaba muy bien, hasta que, últimamente, por unas circunstancias que no viene al caso contar, el grupo se ha distanciado.  Claro, en principio, creí que no iba a poder seguir adelante porque todo en mi mundo se estaba derrumbando y no veía la solución por ningún lado, sin embargo, al pasar el tiempo, me doy cuenta de que en mi nueva vida empiezan a ocurrir ciertos cambios.  ¡Caramba!, me dijo a mí misma, he vuelto a renacer, tengo nuevos amigos, a los que percibo alegres y sinceros.  Ellos me repiten siempre: ¡Chica, la vida no hay que tomársela tan en serio!, date cuenta de que la alegría y la diversión también existen y por eso no dejamos de ser como somos en realidad.
La moraleja que yo extraigo de esta experiencia es que en esta vida, nunca sabes con la que ganas o pierdes, hasta que no te arriesgas y lo haces.





3 comentarios:

  1. El que traslades tus experiencias y los sentimientos que ellas te generan al papel, para compartirlo con nosotros, tal vez ayude a otras personas a entender lo que les pasa, desde otra perspectiva. Gracias, Mercedes

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  2. Felicidades por tu relato Mercedes. Es verdad que a veces la vida se encarga de movernos la tierra bajo los pies, pero la experiencia me ha enseñado que a veces perdiendo también se gana. Un abrazo.

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  3. Me ha encantado la conclusión a la que has llegado . Tu franqueza al expresar tus experiencias es algo muy valioso para tomar en cuenta . Un abrazo, Alicia

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