miércoles, 19 de noviembre de 2014

EL AMOR TOCA A TU PUERTA Lali Marcelino



Tuvimos que liarnos, aunque para ser exactos tendría que decir que quisimos liarnos, después de pasar mucho tiempo negando lo evidente.
Fuimos compañeros de trabajo y esa circunstancia, unida al hecho de que los dos teníamos pareja estable, frenó nuestro impulso, pero… una mirada cómplice, el aire que deja alguien cuando pasa a tu lado, o simplemente oír su nombre, despierta las maripositas en tu estómago y las muy liantes insisten sin parar para que abras la puerta y…¿cómo negarte?
Nunca tuvimos hijos.  Cuando decidimos liarnos la manta a la cabeza y romper con los moldes establecidos, éramos mayores, aunque egoístamente pensé que nos dedicaríamos el uno al otro, sin más.

Hoy cumplimos nuestro treinta aniversario y nos visitan nuestros respectivos hijos, nietos y bisnietos.  ¡Soy muy feliz!



1 comentario:

  1. El amor marca las pautas casi siempre, así que terminamos dirigiendo nuestros pasos hacia donde él nos indica, afortunadamente.

    ResponderEliminar

Nos gusta saber tu opinión, sea cual sea. Déjanos un comentario. Gracias