martes, 14 de junio de 2016

CUESTIÓN DE ESPACIO Ana Benítez


 
Circling Birdies Graffiti Gif by Cheko
            Tenía doce años cuando leí mi primera novela. Mis lecturas se limitaban, hasta entonces, a los comics que compraba semanalmente en el kiosko de la esquina y a un solo libro de texto que compartía en el colegio. Mi inserción  en esta historia y en las que vinieron después, al sentirme protagonista, me permitió soñar, reír, llorar, viajar, fantasear… y expresar ampliamente y sin límites, con pintura, cada narración, cada poema, cada reflexión… lo que hasta ahora era mi pasión; se convirtió en mi frustración. No había sido capaz de plasmar; en un lienzo lo suficientemente extenso, mis inquietudes. Necesita espacio para expresar mucho más. Y por eso mis obras se quedaban a medias; como una novela inacabada. Nunca fue expuesta. No la entenderían. Así que dejé de pintar.
            Una noche paseando por un barrio pobre, topé con una fábrica abandonada. Entré. Miré alrededor. No había nadie. Mis ojos buscaron sus paredes diáfanas.
            Volví al día siguiente. Yo y mis pinturas. Di rienda suelta a mi sueño y manché y tizné y describí y narré con colores fosforescentes sin dejar libre un solo centímetro. Aparecieron unos indigentes, que supuse tenían la vieja fábrica por hogar. Se acercaron y creo que les gustó porque me invitaron a una cerveza.
            Esa fue mi primera exposición y mi última pintura.




2 comentarios:

  1. En tu línea, vas directa al meollo del asunto: nos planteas, nos perfilas en dos líneas, para adentrarnos en el nudo y luego, nos invitas a un final abierto que nos puede llevar en, al menos, dos direcciones. Así nos exiges dilucidar, replantear, decidir…: ¿fue la última pintura una resolución propia o después de la invitación a la cerveza pasó algo que se lo impidió?

    ResponderEliminar
  2. Me ha encantado encontrar tu rincán es esta mañana de sol en Miami

    ResponderEliminar

Nos gusta saber tu opinión, sea cual sea. Déjanos un comentario. Gracias