miércoles, 23 de enero de 2013

DESPERTAR de Esther Morales Fernández




Ese día, despertó y se dio cuenta de que estaba sola, realmente sola.  No tenía a nadie que le dijera te quiero o, simplemente, buenos días.  Empezó a llorar con tristeza, al comprender que la soledad era una constante en su vida y que, debía aceptarlo así, tal y como era.  Miró alrededor de su cuarto y observó una por una, todas las cosas bonitas acumuladas por ella a lo largo de su vida: perfumes, bisutería, joyas, trajes, zapatos, cuadros…
Fue hacia la ventana y miró a través de ella.  La grandiosidad del día con el sol despuntando por el horizonte,  el mar a lo lejos y las montañas reverdecidas por las lluvias caídas en las últimas semanas, le hicieron entender una cosa.  No tenía motivos para estar triste ni sola, ante tanta belleza.  Le dio gracias a Dios por ese nuevo día, secó las lágrimas de su cara y salió a disfrutar de la mañana.

3 comentarios:

  1. Hermoso, Esther. Me ha emocionado leerlo. Muy bien.

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  2. Magnifico relato Esther. La vida siempre es un regalo y más vale vivir sola, que mal acompañada.

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  3. ¡Precioso mamita! Que bonito es que me sigas sorprendiendo y enamorando despues de tantos años. Pero no estas sola mi mami, yo estoy contigo, te digo te quiero todos los dias y se que me escuchas.
    No sabia de este blog hasta hoy, gracias Isabel, mil gracias. Sigue así de linda.

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