Debido a que
ya hace unos cuantos años que me entregaron esa pieza de mármol al nacer,
trataré de resumir en once líneas lo que pude lograr y lo que no. Los ojos de esta escultura han visto cosas
preciosas, pero también muy tristes. La
boca ha susurrado palabras muy dulces, aunque, lamentablemente, desagradables
también. Las manos han acariciado con
dulzura, sin embargo, muchas veces se han retorcido de dolor. Y los pies me han llevado por terrenos
escabrosos, pero yo solo quiero recordar las hermosas veredas por las que han
transitado.
Jugando muy bien con la metáfora, nos presentas las líneas de la vida;de una vida. Hermoso, Alicia.
ResponderEliminarEspero que esa pieza de mármol continúe expresando cosas bellas de tu vida. Eleonora.
ResponderEliminarQue profundo, felicidades.
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