El tulipán es de origen turco y su
reproducción es por bulbo. Su mayor
floración es en primavera, aunque florece todo el año. Hoy en día se conocen más de 1100 variedades.Tulipán
tiene su origen en de palabra turca
Thoulypen, por derivación lingüística.
Los turcos denominaban a las variedades de tulipán Lalé, Kafé Lale y
Kobala Lalé, según zona y época de cultivo.
Hoy conocemos el tulipán como la flor
nacional de Holanda.
Las plantas son tan antiguas como la
humanidad. Desde que el hombre descubrió
que ciertas plantas y especialmente las raíces eran medicinales y comestibles,
algunas fueron trasladadas a los jardines y hoy podemos contemplar sus bellas
flores.
La historia del tulipán comienza con la
caída de Constantinopla, por los turcos, en 1500 a 1550. Los turcos más adinerados eran quienes los
cultivaban con gran secreto en sus jardines protegidos por soldados, para
evitar su robo. Si eso pasaba, impartían
castigos muy severos como la decapitación.
Los militares turcos comparaban sus ejércitos con las enormes
plantaciones de tulipanes, por el parecido del turbante turco con la flor del
tulipán.
Los primeros bulbos de tulipán llegan a
Europa Occidental por medio del Embajador del Emperador Fernando I de Austria
en cuyos jardines florecían, en su palacio en la Villa de Ausburgo. Allí floreció por primera vez el tulipán
Tulipa Turcarum, y por tal motivo se organizaron grandes fiestas al haber
logrado hacer florecer las bellas flores de Turquía.
En 1590, los Países Bajos llaman al
botánico Carolus Clucio para ordenarle cultivar tulipanes en los jardines
botánicos de Leiden, en recuerdo a éste se mantienen todavía bajo el nombre de
El Huerto de Clucio.
Tres fueron las variedades de tulipán
que aseguraban la fortuna a quien los tuviera:
El Semper Augustus, General Bol y Admiral Enkruzen. Existen grabados del S. XVII donde aparece la
Diosa Flora llevando en sus manos estas tres variedades.
De 1952 en adelante, Holanda dictó
leyes para evitar el desastre que minaba la sociedad holandesa con la venta o
subasta de tulipanes. En 1638 la venta
más famosa por subasta de un bulbo de tulipán fue una en la que dieron 2 brazas
de trigo, 4 brazas de pan, 4 brazas de cebada, 8 cerdos cebados, 12 ovejas, 2
litros de viejo vino, 4 toneladas de cerveza, 2 toneles de mantequilla, 12
fardas de queso, 1 dormitorio con ropa, 1 ajuar, 1 copa de plata, todo por un
total de 2500 florines de aquella época.
También hubo otras subastas por valor de 10000 florines por el bulbo del
tulipán Admiral Van Enkjuizen.
El gobierno de Holanda intervino para regular la venta de los bulbos y
evitar la ruina financiera de los Países Bajos que, según los economistas, fue
más grave que la crisis bursátil de Nueva York en 1929.
No voy a alargar más la historia,
aunque tiene muchas anécdotas, porque el mundo del tulipán es increíble.
Si nos trasladamos al año 1949, ese año
fue abierto el parque Keukenfor que perteneció a la condesa Jacobina de Baviera. 28 hectáreas donde se cultivan hoy en día
cerca de siete millones de bulbos. Este
parque ofrece todos los años la más bella exposición de tulipanes en flor del
mundo. Se estima que en 1989 se hizo una
transacción cercana a quinientos millones de dólares en todo el mundo, con la
venta de plantas bulbosas.
En la ciudad de de Limmen, Holanda,
todavía sigue floreciendo la colección de Due Van Tol de 1840 y la variedad
Lutea del año 1620, entre otros. Aunque
no se sea amante de las flores, les diré que ver este parque es una maravilla
que no olvidarán.